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El Parque Natural de Montseny que ocupa una amplia región de Cataluña, tiene para ofrecer al visitante los pronunciados relieves y una riquísima variedad ecológica. Hechos estos que lo llevaron a convertirse en Reserva de la biosfera por parte de la UNESCO en 1978. Allí podemos encontrar en una zona cercana los tres tipos de biomas europeos como son el mediterráneo con sus encinas, alcornoques y pino carrasc, el eurosiberiano con variedad de pino silvestre, hayas y abeto blanco y, por último, y no menos importante, el boreoalpino con una muestra de pradera alpina que invita a recorrerla.
Situado a unos cincuenta kilómetros de Barcelona, ocupa en su extensión diez y ocho municipios pertenecientes a tres comarcas diferentes lo que le confiere otro atractivo más que invita a recorrer la zona y empaparse de la cultura de los diversos pueblos y ciudades que lo conforman.
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Pero no son solo formaciones montañosas, rocosas y de bosques las que encontramos allí, también hay tres grandes ríos como son La Tordera, Riera d’Arbúcles y El Congost.
Con una amplia historia de ocupación por parte de la especie humana desde tiempos prehistóricos, dando un paseo y si tenemos suerte, podríamos encontrar vestigios de aquellos tiempos como hachas y cuchillos de piedra en alguno de los parajes de los pueblos de Aiguafreda, Brull, Montseny o Sant Marcial de Montseny.
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Piedras gigantes en la Sierra del Arca y en Les Pinedes que invitan a conocerlas o la piedra estelada en el plan de La Calma, son otros de los destinos que se pueden visitar.
Para conocer un poco de su historia, podemos adentrarnos en la montaña para ir hasta el castillo del turó de Montgrós ubicado en el pueblo de Brull o las fortalezas de Montclús, en San Esteban de Palautordera y de can Flaquer en Samalús, donde se asentaban los pobladores durante el período ibérico.
Pero también los romanos tuvieron su influencia en cierto período de la historia de esta región, por lo que podemos encontrar construcciones que nos lo recuerdan como la Villa romana de Can Tarrés y otras que se pueden ver si seguimos la Vía Augusta y la Vía Ausa.
Descubrir el proceso que se vivió durante la Edad Media, donde se dio más la explotación de los recursos naturales es otra aventura. Porque entonces nos vamos a encontrar con iglesias que contienen pinturas prerrománicas como la de San Pedro Desplá en Arbucias o el Castillo de Montsoriu, con sus recuerdos militares de la época.
Visitar este tipo de espacios es mucho mejor hacerlo de manera organizada o con un guía especializado como los que ofrece el programa «Vive el parque», en el que podemos encontrar una serie de actividades en varios campos como la plástica, la música, la literatura, muestras folclóricas, escénicas y culturales que nos ayudan a conocer el patrimonio cultural de la región, tanto en el parque como en los municipios que componen el espacio protegido del mismo. Este programa puede ser disfrutado entre julio y septiembre y se convierte en una excelente opción para recorrer y conocer esta maravilla de la naturaleza.
En la actualidad se desarrollan también otra cantidad de actividades que contribuyen a las economías familiares de la región como las agrícolas, forestales y ganaderas, sin dejar de lado que se pueden encontrar servicios de turismo rural, de hostelería que brindan otras formas de conocer y disfrutar la zona.
Riqueza en bosques de varios tipos, prados, ríos y riachuelos, cantizales, peñascos y acantilados, cultivos y eriales, hacen de la región del Montseny un verdadero tesoro por descubrir y disfrutar.
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