Pueblos y cosas que ver en el Parque Nacional de Aiguestortes


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El Parque Nacional de Aiguestortes, se encuentra situado en el norte de Cataluña. Se destacan en sus formaciones dos valles, al oeste el del río San Nicolás con sus prados y meandros de donde proviene el nombre de “Aiguas Tortas” o aguas tortuosas; y al este el valle del río Escrita con el lago de San Mauricio.

Este parque tiene un gran valor biológico, ya que ofrece diversidad de ecosistemas como prados, cultivos y bosques caducifolios en las cotas más bajas, bosques de hojas perennes en las medias; y rocas de alta montaña en las más altas.

Por su acceso restringido y la protección del espacio se ha conseguido la preservación de la flora y la fauna en un estado altamente salvaje. Sin embargo, se encuentra explotación ganadera, turística y las centrales hidroeléctricas.

El parque tiene dos zonas de protección bien diferenciadas, la interna y la periférica. Siendo la interna la que tiene categoría de parque nacional. En esta zona se encuentran varios valles y ríos en los cuales se pueden ver los característicos meandros que dan origen al nombre del parque por sus tortuosas aguas.

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Podemos ver también el lago de San Mauricio, donde se construyó un conjunto de presas para obtener mayor rendimiento hidroeléctrico. Este lago está a los pies de Los Encantados ofreciendo estos dos lugares estampas de enorme belleza.

En la zona de la periferia encontramos también rincones de mucha belleza como el bosque de la Mara de Valencia de Aneu, los valles de Gerber y Cabanes, el circo de Colomers, el circo de Saboredo, la ribera de Valarties, el valle de Besiberri, los lagos de Cabdella, el pico de Montardo y muchos otros parajes de incomparable belleza paisajística y natural.

En las zonas más bajas se pueden ver los cultivos y prados que comparten territorio con los bosques de hayas, robles y fresnos. Mientras que en las altas se pueden observar bosques de abetos y de pino negro, que se transforman en prados llenos de flores de alta montaña cuando se va ascendiendo.

Una buena cantidad de las especies vegetales que se encuentran en el parque son endémicas del Pirineo.

También hay gran cantidad de aves para los amantes de su observación como el quebrantahuesos, el pito negro, la perdiz nival y el águila real, que embellecen el entorno con su vuelo y sus cantos.

Y como un sitio de este tipo debe ofrecer atractivo para todos los públicos, podemos encontrar que el parque cuenta con veinticinco rutas para realizar senderismo, muh bien señalizadas y que presentan distintos recorridos con variados niveles de exigencia.

Se puede hacer también un circuito en bicicleta llamado “Pedales de los refugios”, que dura entre cuatro y seis días, que permite cubrir todo el perímetro del parque.

La ruta de los refugios, que se puede hacer a pie, ofrece nueve etapas y también da la posibilidad de cubrir todo el parque en su perímetro.

Si la idea no es hacer deporte, pero se quiere admirar la naturaleza se puede optar por salir en el teleférico desde el lago Sallente hasta el Estany Gento, para vivir la aventura de otra manera con la belleza del paisaje.

Y para concluir se puede realizar un paseo al valle de Boí, donde se puede encontrar un conjunto monumental de arte románico que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y así también darle paso al encanto de conocer otras culturas.

Paisajes, deporte, cultura, naturaleza y tecnología son los atractivos que ofrece este parque nacional de las aguas tortuosas al visitante.


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