Para ir a Delphos desde Atenas debes dirigirte a la estación secundaria de autobuses de Atenas, esta estación está localizada en la calle Agiou Dimitriou Oplon 12. Para llegar a esta estación la parada más cercana está a 10 minutos andando en la parada de Agios Nikolaos. Otra opción es llegar hasta la parada de Attiki, seguir por la avenida y coger alguno de los autobuses que cruzan esta avenida dirección calle Liosion 260, que es al lado de donde está la terminal B de autobuses de Atenas. Otra opción es coger un taxi desde tu hotel hasta esta estación.
Los autobuses que van de Atenas a Delfos salen en las siguientes horas: 07:30, 10:30, 13:00, 15:30, 17:30, 20:00.
Los autobuses para volver de Delfos a Atenas tienen el siguiente horario: 11:00, 13:30, 16:00, 18:00
Nuesta visita a Delfos. Que ver en Delfos
Hoy, el objetivo era la visita Delfos desde Atenas en el mismo día. Tras el sufrimiento para llegar a la terminal B de autobuses de Atenas, descubrimos que en Grecia todavía existe la figura de la mujer que a cambio de dejar limpio el baño le tienes que dar un dinerito.
Una vez cogido el autobús, empezamos la ruta de Atenas a Delfos, nos quedaban 3 horas. A mitad camino tuvo que parar el autobús porque había retención en mitad de la nada. En realidad, lo que ocurrió es que había era un poblado gitano gigantesco, y a juzgar por los indicios. Los niños a la salida de una curva, hacían parar a los coches, y cuando paraban, atracaban a sus ocupantes. A una mujer que paró le robaron el bolso.
Llegamos a Delfos sobre la 1 del mediodía con un calor sofocante. Delfos está en un un entorno natural muy bonito rodeado de montañas, vegetación, y un lago relativamente cerca. El pueblo de Delfos actual también tiene su encanto, bastante cuidado, ya que vive del turismo.
La ciudad está a un kilómetro del pueblo. Tienes que ir caminando por el arcén de la carretera hasta llegar a un desvío a mano izquierda, muy bien señalizado. Al fondo, el museo y la taquilla.
Con unas temperaturas que se acercaban a los 40 grados comenzamos la ascensión a la antigua ciudad. En ella tuvimos que seguir la estrategia de ir de sombra en sombra. El calor se unía al desnivel de la montaña.
Sobre las 7 de la tarde pudimos coger el autobús de vuelta a Atenas. Durante el trayecto, será recordado el adelantamiento que hizo nuestro autobús a otro autobús en una carretera de doble sentido y con coches de viniendo en sentido opuesto. Sí, los griegos son muy kamikazes conduciendo.